El pasado mes de enero surgió la gran polémica sobre el servicio de mensajería WhatsApp al anunciar los cambios en su política de privacidad. La polémica tiene que ver con la intención de la compañía de compartir determinados datos con Facebook para que, a su vez, Facebook pueda hacer negocio con ellos.
Facebook puede utilizar la información que recibe para operar, promocionar, mejorar, entender, personalizar, respaldar y promocionar nuestros servicios y sus ofertas, incluyendo los productos de las empresas de Facebook.
Entre los datos que Whatsapp compartirá con Facebook se incluyen el número de teléfono, datos de transacciones, indormación relacionada con el servicio, información sobre la interacción de los usuarios entre sí y con las empresas, información sobre el dispositivo móvil, nivel de carga de la batería y dirección IP entre otros.
Loas cambios de Whatsapp
El principal cambio en la actualización de la aplicación afectaría a la forma en la que los usuarios se comunican con empresas, ya que la compañía incluirá en la nueva actualización opciones para que los usuarios puedan chatear con empresas a través de WhatsApp, hacer preguntas, realizar compras y obtener información. La compañía asegura que los chats privados y grupos con amigos y familiares no sufrirán ningún cambio, ya que no comparte los datos de contacto con Facebook y que no proporcionará números de sus usuarios a ninguna empresa.
WhatsApp asegura que la información que envía y recibe de otras empresas de Facebook sirve para personalizar las funciones y contenido, ayudar a completar compras y transacciones, mostrar publicidad y ofertas relevantes e integrar WhatsApp con otros servicios de Facebook como la plataforma de pagos Facebook Pay entre otros.
Tras verse obligado a aplazar sus condiciones para aclarar la ‘desinformación’ al respecto de sus más de 2.000 millones usuarios, la compañía actualizará las condiciones de uso como ya avisó el próximo 15 de mayo.
Ese día se cumple el plazo para que sus clientes acepten los nuevos términos y condiciones de uso de la compañía, la cual afirma que estas nuevas condiciones no tendrán efectos prácticos, por el momento, en la privacidad de los residentes de países miembros de la Unión Europea al impedir el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) que se compartan datos con Facebook.
La compañía asegura que no borrará las cuentas de los usuarios que no acepten las condiciones.
No obstante, aquellos usuarios que no acepten la nueva actualización, se encuentren o no en la Unión Europea, comenzarán a tener un servicio limitado a partir del día 15 de mayo.
No podrán, por ejemplo, acceder a su lista de chats al abrir la aplicación, aunque sí que podrán responder al momento llamadas y videollamadas, leer notificaciones o responder mensajes, así como devolver llamadas o videollamadas perdidas.
Pasadas unas semanas de uso limitado de la aplicación, la situación del usuario que todavía no haya aceptado los nuevos cambios y políticas se complicará, ya que no podrá recibir llamadas ni notificaciones entrantes y WhatsApp dejará de enviar mensajes y llamadas de teléfono, según afirma la compañía.
Finalmente, aquellos usuarios que todavía no hayan aceptado las nuevas condiciones, tendrán que aceptar o no podrán utilizar WhatsApp en absoluto.
Por último, otra de las nuevas condiciones de la compañía es que, si un usuario no hace uso de WhatsApp durante un periodo superior a 120 días, su cuenta quedará eliminada con el objetivo de preservar la seguridad, limitar la retención de datos y proteger la privacidad de los usuarios.